El coito del presidente.

Prometiendo ser suave si sus votantes quieren que sea suave, pero ser también firme y agresivo si le piden que así proceda, Pedro Sánchez, presidente y futuro candidato del PSOE a las Elecciones Generales, aseguró que hará el amor con todos y cada uno de los españoles que se decidan a apoyarle con su voto.

“Voy a hacer lo que sea para echar a Rajoy de la presidencia, lo que sea. Cualquier cosa que yo pueda hacer… la haré”, declaró Pedro Sánchez una mañana durante un acto de precampaña del PSOE.

“Haré lo que sea y no me negaré a nada. Lo que sea», ha añadió a continuación.

“Me refiero a practicar el coito, si es necesario, con todos los que apoyen el programa socialista”, ha aclarado el líder del PSOE tras unos segundos de silencio. “Mi cuerpo, mi cara, mis firmes brazos… todo mi yo está a disposición de España”, ha sentenciado.

Sánchez ha insistido con vehemencia en que el país está cansado de políticos que se escudan tras una pantalla. «Queremos políticos que se muestren como son: desnudos, vulnerables, humanos y con capacidad tanto para dar como para recibir amor”, ha dicho. Ha agregado que dispone de “todo el vigor de la juventud” pero que no carece de “la experiencia necesaria que los españoles merecen”.

«Hombres, mujeres… no decepcionaré a ningún votante», ha insistido el político.

“Vanesa: voy a mesar tu pelo si confías en mí, mi nombre es Pedro Sánchez y voy a ser tu presidente, pero también puedo ser quien quieras”, dijó el político entre aplausos, refiriéndose a una ideal votante con quien haría el amor tras proclamarse presidente que resultó ser imaginaria en su retorcido pensamiento.

«Deja que te susurre a la oreja mi programa electoral, Vanesa, las noches del socialismo son eternas. ¿Confías en mí? ¿Cuento con tu consentimiento para llevar a España al clímax, Vanesa?”, ha exclamado, insistiendo con el símil.

El socialista no quiso aclarar a los periodistas si también haría el amor con otros grupos parlamentarios en caso de necesitar pactar para llegar a La Moncloa. «No me cierro a nada ni a nadie», ha dicho.

Toda esta inmoral verborrea poligámica hace recordar que alrededor de los embarazos, las relaciones sexuales y el cuerpo humano se desarrollaran en el pasado una serie de mitos que paso a puntualizar socarronamente, como los siguientes:

  • Si se tiene sexo con un hombre, al que no amas, hace que tengas un hijo extremadamente feo.
  • Había una superstición que decía que la dirección e intensidad del viento afectaba al temperamento del recién nacido.
  • Si la mujer se masturbaba mucho, le producía locura e infertilidad. Si desde joven se masturbaba, afectaba al desarrollo de sus órganos.
  • Pensaban que la masturbación se evitaba comiendo alimentos poco condimentados, evitando el consumo de mostaza, pimienta, cerveza, vino, y fumar tabaco. Además de la dieta rigurosa, la intensa actividad física consumía energía y evitaba la masturbación.
  • Curiosamente, fue en esta época cuando se inventó el consolador mecánico, para tratar la histeria de la mujer
  • La forma de evitar el embarazo era bailar continuamente.
  • Se decía que una mujer no podía quedar embarazada de una violación debido a que el cuello uterino es muy estrecho y tiene que succionar el semen durante el orgasmo que era inexistente en las violaciones.
  • Se creía que el recién nacido se parecería físicamente a quien tuviera el orgasmo más intenso durante el contacto sexual.
  • Si el coito se realizaba en una escalera, el niño tendría la espalda torcida.

Por mi parte, convendría saber si es puterio y anti puritanismo lo que le estigmatiza y nos lleva a ignorar sus pretensiones. No lo parece en un país en el que la normalización de las divergencias sexuales ya se refleja en nuestras leyes y la liberalización sexual se percibe en nuestros comportamientos. Es más, la creciente relativización moral ha favorecido que un mayor número de hombres y mujeres opte por una ocupación vergonzante frente a la semi-esclavitud de los empleos de limpieza y cuidados, la otra salida patriarcal que existía para la pobreza femenina y alguna masculina. Espero que no me llamen puritano si ahora digo que la solución pasaría por valorizar estos trabajos y erradicar esta ocupación del mandatario antes de que el presidente acabe por coitar con todos los hombres y mujeres de España, voten o no al PSOE.

En lo que a mí respecta como hombre, puedo decir que, antiguamente se entendía por sodomía el conjunto de todos los actos sexuales que no tenían una finalidad reproductiva. No fue hasta el año 1848, con el nuevo Código Penal, cuando la concepción de la sodomía desaparece definitivamente, hecho éste que se mantuvo en las nuevas versiones de 1850, 1860 y 1870. Esto no es óbice para que pudieran emplearse otras leyes, como las de “escándalo público” o aquellas sobre las “faltas contra la moral, el pudor y las buenas costumbres” con las que Pedro Sánchez no comulga.

Me niego a que Pedro Sanchez me sodomice por votarle como ya se le ha pasado por su enfermiza mente y ha hecho publico por lo que no votaré al PSOE. El coito del Presidente para Begoña/o/e.

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